DIA 256--Job 35--37 Sabiduría 11,15-26 Lucas 23,1-56



Job 35
"1.Elihú volvió a tomar la palabra y dijo: 2.¿Crees que has hablado con sensatez y que te has justificado ante Dios 3.al decirle: Qué te importa? No te alcanza mi pecado. 4.Voy a responderte a ti, y contigo a tus amigos. 5.Contempla los cielos y mira, observa cómo las nubes están más arriba que tú. 6.Si pecas, ¿qué le haces? Si se multiplican tus ofensas, ¿en qué lo perjudicas? 7.Y con ser justo, ¿qué le das o qué recibe él de tu mano? 8.A un hombre como tú afecta tu maldad, tu justicia es a la medida de los hombres. 9.Gritan bajo el peso de la opresión, y claman porque los poderosos los dominan, 10.pero no preguntan: «¿Dónde está Dios, que nos creó, que da en las noches cantares de júbilo, 11.que nos instruye por medio de las bestias y nos da ejemplos en las aves del cielo?» 12.Por eso, él no responde cuando gritan, cuando los malos los maltratan. 13.En vano claman: Dios no escucha, el Omnipotente no los atiende. 14.Peor todavía si dices que no encuentras a Dios, y que después de preparar tu defensa lo esperas. 15.Lo mismo si dices que su enojo no sabe castigar y que no se entera de los abusos. 16.Por tanto, Job habla para decir nada y multiplica sus discursos por falta de conocimiento.»"


Job 36
"Elihú prosiguió diciendo: 2.«Espera un poco y yo te instruiré, pues tengo más que decir en favor de Dios. 3.Voy a llevar muy lejos mi saber y daré la razón a mi Hacedor. 4.En verdad no hay mentiras en mis palabras, pues el que te enseña es hombre de mucha experiencia. 5.Sabes queDios es muy fuerte, pero no rechaza al hombre de limpio corazón. 6.No deja vivir al malvado a sus anchas, sino que hace justicia a los desvalidos: 7.no aparta su mirada de los justos. Si pone en el trono a los reyes, es para que perdure su reinado; pero si se dejan dominar por la soberbia, 8.entonces se ven cargados de cadenas amarrados con cuerdas de aflicción. 9.Después les muestra cómo ha sido su conducta y sus faltas nacidas de su orgullo. 10.Les llama la atención al oído, y los manda apartarse del mal. 11.Si escuchan ylo sirven, acabarán felices sus días, y sus años, con toda tranquilidad. 12.Pero si no lo escuchan, les quitará la vida de un golpe y morirán por no haber entendido. 13.Son hombres desleales que se rebelan en vez de suplicarlo cuando los encadena, 14.mueren en plena juventud y su vida acaba despreciada. 15.Dios salva al miserable por su misma pobreza. y le enseña por medio del sufrimiento. 16.También a ti te librará de la angustia. una abundancia sin límites la reemplazará, y tu mesa rebosará de sabrosos manjares. 17.Entonces enjuiciarás al malvado justicia y derecho estarán en tus manos. 18.No te dejes, pues, llevar por la ira ni te dejes comprar por los regalos. 19.Pide cuentas tanto al rico como al que nada tiene, al débil como al poderoso. 20.No aplastes a aquellos que te son extraños, para poner en su lugar a tus parientes; 21.guárdate de inclinarte hacia la injusticia, pues ésta fue la causa de tu prueba. 22.Mira, Dios es sublime en su fuerza, ¿qué maestro puede comparársele? 23.¿Quién le pedirá cuentas por l o que hace? ¿Quién lo dirá: «Has actuado mal?» 24.Acuérdate, pues, de ensalzar su obra, después que tantos hombres la alabaron. 25.Todo humano la contempla, todo mortal la mira desde lejos. 26.Dios es grande y no sabemos cuánto, el número de sus años es incalculable. 27.El atrae las gotas de agua, los vapores que se transformarán en lluvia. 28.Las nubes la derramarán y la repartirán en el mundo de los hombres. 29.¿Quién puede comprender el despliegue de las nubes y el trueno que en su morada retumba? 30.Vean cómo extiende sus vapores y cubre las profundidades de los mares. 31.Con esto, alimenta a los pueblos y les proporciona abundante comida. 32.En sus manos ha alzado el rayo y le ordena dar en el blanco. 33.Su trueno lo anuncia a los pastores, y los rebaños sienten la tempestad inminente."


Job 37
"Por esto se me estremece el corazón y salta fuera de su lugar. 2.Escuchen el estruendo de su voz, el rumor que sale de su voz, 3.por la inmensidad del cielo arroja su relámpago. que llega a los extremos de la tierra. 4.Detrás de él una voz ruge; truena con su majestuosa voz y no retendrá sus rayos mientras su voz retumbe. 5.Por su voz hace Dios cosas maravillosas, cosas grandes que no comprendemos. 6.A la nieve ordena: Cae sobre la tierra, y a los aguaceros: Sean fuertes. 7.Así mantiene encerrados a los hombres, para que reconozcan que ésa es su obra. 8.Las fieras huyen a sus guaridas y permanecen en sus refugios. 9.Del sur viene el huracán y del norte, el frío. 10.Por el soplo de Dios se forma el hielo y se pone sólida la superficie de las aguas. 11.O bien, las nubes arrojan su rayo y el nublado difunde sus relámpagos. 12.Los envía por todos lados para que hagan el trabajo que él ordena sobre toda la superficie de la tierra. 13.Si es para castigo, harán su voluntad, si es para bendición, será recibida. 14.Presta oídos a esto, Job: detente y observa las maravillas de Dios. 15.¿Sabes tú cómo manda él a su creación y cómo de la nube brilla el relámpago? 16.¿Sabes tú cómo flotan las nubes, obra maravillosa del Perfecto Sabio? 17.Tú que sientes quemar tus vestidos cuando la tierra descansa bajo el viento del sur, 18.¿acaso extendiste con él el firmamento, sólido como espejo de metal fundido? 19.Enséñame qué debemos decirle... Quedémonos aquí que ya viene la oscuridad. 20.Si yo hablo, ¿alguien se lo cuenta?, ¿le informa de lo que uno ha dicho? 21.Pero ya no se ve la luz, oscurecida por las nubes... y ahora pasa el viento que las despeja... 22.Del norte llega una luz dorada: es la gloria terrible en torno a Dios. 23.¡Es el Poderoso, al que no podíamos alcanzar! Su fuerza es soberana, sus juicios y su justicia no oprimen a nadie. 24.Por eso, los hombres lo deben temer, todos los sabios juntos no son nada ante él.»"


Sabiduría 11,15-26
"15.Por sus locos e inicuos pensamientos por los que, extraviados, adoraban reptiles sin razón y bichos despreciables, les enviaste en castigo muchedumbre de animales sin razón, 16.para que aprendiesen que, por donde uno peca, por allí es castigado. 17.Pues bien podía tu mano omnipotente - ella que de informe materia había creado el mundo - enviar contra ellos muchedumbre de osos o audaces leones, 18.o bien fieras desconocidas, entonces creadas, llenas de furor, respirando aliento de fuego, lanzando humo hediondo o despidiendo de sus ojos terribles centellas, 19.capaces, no ya de aniquilarlos con sus ataques, sino de destruirlos con sólo su estremecedor aspecto. 20.Y aun sin esto, de un simple soplo podían sucumbir, perseguidos por la Justicia, aventados por el soplo de tu poder. Pero tú todo lo dispusiste con medida, número y peso. 21.Pues el actuar con inmenso poder siempre está en tu mano. ¿Quién se podrá oponer a la fuerza de tu brazo? 22.Como lo que basta a inclinar una balanza, es el mundo entero en tu presencia, como la gota de rocío que a la mañana baja sobre la tierra. 23.Te compadeces de todos porque todo lo puedes y disimulas los pecados de los hombres para que se arrepientan. 24.Amas a todos los seres y nada de lo que hiciste aborreces, pues, si algo odiases, no lo habrías hecho. 25.Y ¿cómo habría permanecido algo si no hubieses querido? ¿Cómo se habría conservado lo que no hubieses llamado? 26.Mas tú con todas las cosas eres indulgente, porque son tuyas, Señor que amas la vida,"



Lucas 23,1-56
"1.Y levantándose todos ellos, le llevaron ante Pilato. 2.Comenzaron a acusarle diciendo: «Hemos encontrado a éste alborotando a nuestro pueblo, prohibiendo pagar tributos al César y diciendo que él es Cristo Rey.» 3.Pilato le preguntó: «¿Eres tú el Rey de los judíos?» El le respondió: «Sí, tú lo dices.» 4.Pilato dijo a los sumos sacerdotes y a la gente: «Ningún delito encuentro en este hombre.» 5.Pero ellos insistían diciendo: «Solivianta al pueblo, enseñando por toda Judea, desde Galilea, donde comenzó, hasta aquí.» 6.Al oír esto, Pilato preguntó si aquel hombre era galileo. 7.Y, al saber que era de la jurisdicción de Herodes, le remitió a Herodes, que por aquellos días estaba también en Jerusalén. 8.Cuando Herodes vio a Jesús se alegró mucho, pues hacía largo tiempo que deseaba verle, por las cosas que oía de él, y esperaba presenciar alguna señal que él hiciera. 9.Le preguntó con mucha palabrería, pero él no respondió nada. 10.Estaban allí los sumos sacerdotes y los escribas acusándole con insistencia. 11.Pero Herodes, con su guardia, después de despreciarle y burlarse de él, le puso un espléndido vestido y le remitió a Pilato. 12.Aquel día Herodes y Pilato se hicieron amigos, pues antes estaban enemistados. 13.Pilato convocó a los sumos sacerdotes, a los magistrados y al pueblo 14.y les dijo: «Me habéis traído a este hombre como alborotador del pueblo, pero yo le he interrogado delante de vosotros y no he hallado en este hombre ninguno de los delitos de que le acusáis. 15.Ni tampoco Herodes, porque nos lo ha remitido. Nada ha hecho, pues, que merezca la muerte. 16.Así que le castigaré y le soltaré.» 18.Toda la muchedumbre se puso a gritar a una: «¡Fuera ése, suéltanos a Barrabás!» 19.Este había sido encarcelado por un motín que hubo en la ciudad y por asesinato. 20.Pilato les habló de nuevo, intentando librar a Jesús, 21.pero ellos seguían gritando: «¡Crucifícale, crucifícale!» 22.Por tercera vez les dijo: «Pero ¿qué mal ha hecho éste? No encuentro en él ningún delito que merezca la muerte; así que le castigaré y le soltaré.» 23.Pero ellos insistían pidiendo a grandes voces que fuera crucificado y sus gritos eran cada vez más fuertes. 24.Pilato sentenció que se cumpliera su demanda. 25.Soltó, pues, al que habían pedido, el que estaba en la cárcel por motín y asesinato, y a Jesús se lo entregó a su voluntad. 26.Cuando le llevaban, echaron mano de un cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le cargaron la cruz para que la llevará detrás de Jesús. 27.Le seguía una gran multitud del pueblo y mujeres que se dolían y se lamentaban por él. 28.Jesús, volviéndose a ellas, dijo: «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras y por vuestros hijos. 29.Porque llegarán días en que se dirá: ¡Dichosas las estériles, las entrañas que no engendraron y los pechos que no criaron! 30.Entonces se pondrán a decir a los montes: ¡Caed sobre nosotros! Y a las colinas: ¡Cubridnos! 31.Porque si en el leño verde hacen esto, en el seco ¿qué se hará?» 32.Llevaban además otros dos malhechores para ejecutarlos con él. 33.Llegados al lugar llamado Calvario, le crucificaron allí a él y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. 34.Jesús decía: «Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen.» Se repartieron sus vestidos, echando a suertes. 35.Estaba el pueblo mirando; los magistrados hacían muecas diciendo: «A otros salvó; que se salve a sí mismo si él es el Cristo de Dios, el Elegido.» 36.También los soldados se burlaban de él y, acercándose, le ofrecían vinagre 37.y le decían: «Si tú eres el Rey de los judíos, ¡sálvate!» 38.Había encima de él una inscripción: «Este es el Rey de los judíos.» 39.Uno de los malhechores colgados le insultaba: «¿No eres tú el Cristo? Pues ¡sálvate a ti y a nosotros!» 40.Pero el otro le respondió diciendo: «¿Es que no temes a Dios, tú que sufres la misma condena? 41.Y nosotros con razón, porque nos lo hemos merecido con nuestros hechos; en cambio, éste nada malo ha hecho.» 42.Y decía: «Jesús, acuérdate de mí cuando vengas con tu Reino.» 43.Jesús le dijo: «Yo te aseguro: hoy estarás conmigo en el Paraíso.» 44.Era ya cerca de la hora sexta cuando, al eclipsarse el sol, hubo oscuridad sobre toda la tierra hasta la hora nona. 45.El velo del Santuario se rasgó por medio 46.y Jesús, dando un fuerte grito, dijo: «Padre, en tus manos pongo mi espíritu» y, dicho esto, expiró. 47.Al ver el centurión lo sucedido, glorificaba a Dios diciendo: «Ciertamente este hombre era justo.» 48.Y todas las gentes que habían acudido a aquel espectáculo, al ver lo que pasaba, se volvieron golpeándose el pecho. 49.Estaban a distancia, viendo estas cosas, todos sus conocidos y las mujeres que le habían seguido desde Galilea. 50.Había un hombre llamado José, miembro del Consejo, hombre bueno y justo, 51.que no había asentido al consejo y proceder de los demás. Era de Arimatea, ciudad de Judea, y esperaba el Reino de Dios. 52.Se presentó a Pilato y le pidió el cuerpo de Jesús 53.y, después de descolgarle, le envolvió en una sábana y le puso en un sepulcro excavado en la roca en el que nadie había sido puesto todavía. 54.Era el día de la Preparación, y apuntaba el sábado. 55.Las mujeres que habían venido con él desde Galilea, fueron detrás y vieron el sepulcro y cómo era colocado su cuerpo, 56.Y regresando, prepararon aromas y mirra. Y el sábado descansaron según el precepto."