No hay nada que no tenga que pasar la prueba de existir, de ser. Pero cuando se trata de corazones, es Dios quien tiene la exclusividad de hacernos ver y descubrir lo que tiene nuestro corazón dentro de sí. En ese proceso aprendemos a dar y pedir, que son formas concretas del Amo
Mejor un mendrugo seco con tranquilidad que una casa llena de banquetes con discordia.
El servidor prudente se impondrá al hijo desvergonzado y compartirá la herencia con los hermanos.
Hay un crisol para la plata y un horno para el oro, pero el que prueba los corazones es el Señor.
17:2 El servidor prudente se impondrá al hijo desvergonzado y compartirá la herencia con los hermanos.
17:3 Hay un crisol para la plata y un horno para el oro, pero el que prueba los corazones es el Señor.
17:4 El malhechor hace caso a la maledicencia, el mentiroso presta oído a la lengua maligna.
17:5 El que se burla del pobre ultraja a su Creador, el que se alegra de una desgracia no quedará impune.
17:6 Corona de los ancianos son los nietos, y la gloria de los hijos son sus padres.
17:7 No le queda bien al necio un lenguaje refinado,¡cuánto menos a los nobles la mentira!
17:8 Un regalo es un talismán para el que lo da: dondequiera que vaya, todo le sale bien.
17:9 El que disimula una ofensa cultiva la amistad, volver sobre la cosa separa del amigo.
17:10 Hace más una reprensión a un hombre inteligente que cien golpes a un necio.
17:11 El malvado sólo busca la rebelión, pero le será enviado un mensajero cruel.
17:12 Más vale toparse con una osa privada de sus crías que con un necio en su locura.
17:13 Si alguien devuelve mal por bien, la desdicha no se apartará de su casa.
17:14 Iniciar un altercado es abrir una compuerta: retírate antes que estalle la disputa.
17:15 Absolver al malvado y condenar al justo son dos cosas que abomina el Señor.
17:16 ¿Para qué sirve el dinero en manos de un necio?¿Para adquirir sabiduría? ¡Si no tiene inteligencia!
17:17 El amigo ama en cualquier ocasión, y un hermano nace para compartir la adversidad.
17:18 Es un insensato el que estrecha la mano para salir fiador de su prójimo.
17:19 El que ama las querellas ama el pecado, el que alza demasiado su puerta busca la ruina.
17:20 El corazón perverso no hallará la felicidad, y la lengua tortuosa caerá en la desgracia.
17:21 El que engendra a un tonto, es para su aflicción, y no hay alegría para el padre de un necio.
17:22 Un corazón alegre es el mejor remedio, pero el espíritu abatido reseca los huesos.
17:23 El malvado acepta regalos bajo cuerda para torcer los senderos de la justicia.
17:24 Delante del hombre inteligente está la sabiduría, pero el necio mira a cualquier parte.
17:25 Un hijo necio es la tristeza de su padre y la amargura de aquella que lo engendró.
17:26 Si no está bien multar a un hombre justo, golpear a los nobles supera toda medida.
17:27 El que mide sus palabras es un hombre que sabe, y el que mantiene su sangre fría es inteligente.
17:28 Hasta el necio, si calla, puede pasar por sabio, y por inteligente, si cierra los labios.