Antiguo Testamento
En el Antiguo Testamento no es tan fácil descifrar los autores por la antigüedad de los relatos. Sin embargo se tienen ideas generalizadas.
El Pentateuco o Toráh que es la columna vertebral del Antiguo Testamento tiene 5 libros: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio. Durante muchos siglos se pensó que el autor de estos libros era Moisés. Sin embargo la ciencia siempre estuvo cuestionando aparentes contradicciones en la Biblia o diferencias de estilo de redacción por lo que empezaron a cuestionar incluso la inspiración misma en la Biblia. En el siglo XIX, con el avance de estudios y hallazgos arqueológicos, se logró desarrollar una teoría que trataba de encontrar la respuesta a estos interrogantes sin tener que negar la inspiración de la Escritura.
Ya en 1753 el médico francés J. Astruc había formulado una teoría de 2 fuentes en el Pentateuco. Posteriormente en el siglo XIX, Julio Wellhaussen expuso la teoría Documentaría en la cual hablaba de cuatro fuentes en la redacción final del Pentateuco hecha en el siglo V A.C y en la que se contenía muy poco de Moisés.
La Comisión Bíblica se mostró un poco escéptica en 1906 con esta teoría pero “reconociendo la sustancial autenticidad e integridad mosaica, afirmaba la posibilidad de aditamentos posteriores, introducidos por un autor inspirado y, por supuesto, el posible uso de materiales diversos”[7]
Hoy en día la teoría Documentaria es la mas utilizada en la Iglesia Católica, mientras en las iglesias protestantes tradicionales siguen considerando a Moisés como único redactor de todo el Pentateuco.
Cuatro Tradiciones:
Yahvista. Se llama así porque llaman a Dios con el nombre de Yahvé. Se puede ubicar su composición hacia el siglo X A.C, justo durante el reinado de Salomón. Su objetivo es mostrar a la monarquía davídica como parte del Plan de Dios. Se dirigía al pueblo del sur. A esta tradición se le atribuye el relato de (Gen 2, 4-25), (Gen 4, 25-26), (Gen 11,1-9)
Elohista. Se llama así porque llama a Dios con el nombre de Elohim. Se puede ubicar su composición en el siglo VIII A.C, justo antes de la caida del Israel por los asirios. Su objetivo es mostrar que la verdadera alianza no es con la casa de David sino la alianza en el Sinaí. Se dirigía al Reino del Norte. A esta tradición se le atribuye el relato de (Ex 24,3.6-8), (Deu 27, 1-26), (Gen 1,1-2.4a)
Deuteronomista. Nos habla de una nueva alianza, de un cambio interior. Esta tradición se desarrolla entre los siglos VIII – VII – VI. Busca reinterpretar tanto la alianza davídica como la mosaica y abrir una nueva esperanza mas hacia lo social. A esta tradición corresponden los libros de Josué, Jueces, Samuel y Reyes.
Sacerdotal. Recibe ese nombre por ser desarrollada por los sacerdotes después del destierro. Su idea era volver a reorganizar al pueblo en torno a los elementos religiosos:
*El Templo
*La Ley
*Los sacrificios
Con esto buscaban reflexionar sobre el verdadero culto a Dios. A esta tradición pertenecen las genealogías y el libro del Levítico.
Los libros históricos. Ya mencionamos que los libros históricos corresponden a la Tradición Deuteronomista.
Los libros proféticos. Los libros proféticos tienen una particularidad ya que sus autores son los mismos profetas. Sea entendiendo que ellos mismos escribieron (Proto Isaías) o bien sea que sus palabras fueron puesta por escrito por alguien posterior (Jeremías y Ezequiel).
Los otros libros. Encontramos otros libros en los cuales el nombre de libro corresponde no al autor sino al protagonista del libro. Ej: Tobías, Esther, Ruth, Job, Judith.
También encontramos libros como Proverbios que se atribuye al rey Salomón (Prov 1,1) o Eclesiástico, que en su prólogo menciona al autor: Jesús Ben Sirac.
Nuevo Testamento.
En el Nuevo Testamento sí es fácil identificar a cada autor de los libros debido a la importancia y relevancia que tenía el autor para considerar su inspiración.
Evangelios. Así se sabe que cada Evangelio corresponde a un autor específico y su correlación con los hechos narrados. Mateo y Juan fueron apóstoles de Jesús; y Lucas y Marcos fueron discípulos de Pablo y Pedro respectivamente. El primer Evangelio escrito fue Marcos hacia el año 60-65 D.C; El de Mateo hacia el 70-80 D.C; el de Lucas hacia el 80 D.C y el de Juan hacia el 90 D.C
Libro Histórico. Los Hechos de los Apóstoles son obra de Lucas (Hch 1,1)
Las cartas. En esta sección hay varios autores que podemos clasificar así:
Paulinas: Son las cartas escritas por Pablo. Hay cuatro bloques principales:
Grandes Cartas: Rom, Cor, Gal.
Cartas de la Cautividad: Flp, Col, Ef, Flm
Cartas Pastorales: Tim, Tit
Escatológicas: Tes.
Otros apóstoles. Encontramos a Pedro, Santiago, Judas, Juan. De Pedro, la segunda carta corresponde a un discípulo suyo; y las cartas de Juan corresponden a una escuela joánica.
Apocalipsis. Este libro según su capítulo primero fue escrito por el apóstol Juan mientras estaba desterrado en Patmos. Hacia el año 90-100 D.C
GENEROS LITERARIOS
Estudiar las formas literarias en que escribieron los autores sagrados nos ayudará a entender mejor lo que nos quisieron transmitir. La Iglesia ha recalcado mucho esto en diferentes ocasiones. El Papa Pío XII en su encíclica Divino Afflante en 1943 nos escribe:
“Así pues, para satisfacer debidamente a las exigencias actuales de los estudios bíblicos, el exegeta católico ha de usar también prudentemente de este recurso para exponer la Sagrada Escritura y mostrar y comprobar su absoluta inerrancia: investigue hasta qué punto la forma o el género literario empleado por el autor sagrado pueda conducir a una verdadera y genuina interpretación”[8]
Existen muchos géneros o formas literarias que podemos encontrar en la Biblia pero vamos a mencionar las más importantes:
Historia. La historia para los judíos no es como para nosotros hoy día, en donde es más importante la precisión de hechos, cantidades y fechas. Para los escritores sagrados es más importante la relevancia de los hechos, el por qué sucedieron y su proyección para el futuro. Es como aprender de lo que les sucede.
Podemos distinguir varias historias escritas: la patriarcal, que relata la vida de los patriarcas; la deuteronomista, que relata el asentamiento en Canaan hasta el destierro de ambos pueblos; la historia cronística, que relata después del destierro.
También podemos encontrar novelas históricas: relatos que utilizan elementos históricos verdaderos pero con personajes didácticos: Judith, Tobías
Ley. La ley como género literario tiene sus raíces mucho mas allá de Israel teniendo sus primeros esbozos en códigos anteriores como los textos de Nuzi, el Codigo de Hammurabi, Textos de Ugarit, Textos de Mari[9].
Principalmente la ley en la Biblia son colecciones de normas de una comunidad enfocada al culto a Dios. Se pueden distinguir varios bloques: Los diez mandamientos (Ex 20, 2-17); El decálogo cúltico (Ex 34,14-26); el código deuteronómico (Dt 12-26). La ley como género literario se presenta en dos formas:
* Apodíctico. Hace referencia al mandato como tal. (Ex 20)
* Casuístico. Se presenta en forma de caso con las palabras: si .... entonces ... Ej.: (Ex 21, 18), (Ex 21,2), (Ex 22)
Profecía. El género profético es muy peculiar en el Antiguo Testamento. Podemos distinguir dos tipos de profetismo: el oral y, el oral y escrito. En el oral simple distinguimos Abraham, Moisés, Samuel, Elías y Eliseo. En el escrito están los que pertenecen a los libros proféticos: Isaías, Ezequiel, Zacarias, Ageo, entre otros. Estos libros recogen las palabras de los profetas, las cuales las manda a decir el mismo Dios. Ellos son entonces los transmisores de las palabras de Yahvé. Son muy comunes las expresiones: Oráculo de Yahvé, Esto dice el Señor.
Lírica. Este genero lírico corresponde al estilo poético oriental antiguo. En este género encontramos tres libros específicos: Los Salmos, El Cantar de los cantares y Lamentaciones. En estos libros encontramos: acciones de gracias (Sal 138), himnos de Bendición (Sal 81), Lamentaciones (Lam 3), Elogio al amor (Cant 2)
Sapiencial. Este genero ya es propio de libros como Proverbios, Sirácides, Sabiduría. Se encarga de máximas o reflexiones que llevan al ser humano a mejorar su condición humana en diferentes aspectos de la vida. “Versa sobre las realidades diversas de la vida, comportamientos humanos, actitudes, situaciones, relaciones”[10].
Proverbios nos trae sentencias; Eclesiastés reflexiona sobre diversos valores, entre otros.
Apocalíptico. Este lenguaje está expresado en simbolismos y siempre tiende a mostrar el inminente fin de las cosas. Este tipo de literatura aparece condensada en el Antiguo Testamento en Daniel y algunos pasajes como (Is 24-27), (Ez 38-39), (Zac 9-14). En el Nuevo Testamento tiene su mayor expresión en el Apocalipsis y en pasajes como (Mt 24).
Existen otros géneros como parábolas (Mc 4,34), Epistolar (Usado en las cartas, tiende a la exhortación), el mito ( como en los relatos del Génesis)