Pentecostés


comicdepentecostes1.png

comicdepentecostes2.jpg

comicdepentecostes3.jpg

comicdepentecostes4.jpg

comicdepentecostes5.jpg

comicdepentecostes6.png
El Espíritu Santo desciende en Pentecostés
“El día de Pentecostés, estando reunidos todos los creyentes, vino repentinamente del cielo un estruendo, como de un vendaval, que llenó por completo la casa donde se habían congregado. En seguida aparecieron, como lenguas de fuego, unas llamas que se posaron sobre la cabeza de cada uno de los presentes. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en lenguas que no conocían, conforme a lo que el Espíritu les daba que hablasen. Por aquellos días, a causa de la fiesta, se había reunido en Jerusalén un gran número de judíos piadosos, procedentes de muy distintas naciones. Al oir aquel estruendo, la muchedumbre corrió a ver lo que estaba sucediendo; y todos se sentían confusos, porque cada uno escuchaba en su propio idioma lo que decían los apóstoles. Atónitos y maravillados, comentaban: ¿Cómo es posible que a estos, que son galileos, les oigamos hablar en el idioma de cada uno de nuestros países de origen? Entre nosotros hay gente de Partia, Media, Elam y Mesopotamia; de Judea, Capadocia, Ponto, Frigia y Panfilia; de Egipto y de las regiones africanas más allá de Cirene. También hay romanos aquí residentes, tanto judíos como prosélitos del judaísmo, y cretenses y árabes. Y todos les oímos contar en nuestra propia lengua las obras maravillosas de Dios. Se preguntaban, pues, atónitos y perplejos:” (Hch.2:1-11 CST)

Fuente:
Comics de Pentecostés extraído y adaptado del portal de la fe católica “infancia misionera”